Vistas de página en total

jueves, 29 de octubre de 2015

LA CULTURA ESCOLAR EN TIEMPOS DE NUESTROS ABUELOS. VALVERDE DEL CAMINO.1870-1931 (I).


LA CULTURA ESCOLAR EN TIEMPOS DE NUESTROS ABUELOS. VALVERDE DEL CAMINO (1870-1931).
Juan Carlos Sánchez Corralejo.
Revista Facanías, Octubre de 2015.
EL MAPA ESCOLAR DE VALVERDE
Si en su día nos dedicamos a reconstruir el mapa escolar valverdeño, desde la época Isabelina[1] hasta bien avanzado el siglo XX[2], ahora pretendemos apuntar algunos datos sobre la cultura escolar, centrados inicialmente en la época de la Restauración, en las décadas finales del XIX y las iniciales del siglo XX.   
En el año 1869, el padrón de Valverde reflejaba una población de 6.949 personas, que se elevó a 7.014 en el censo de 1877. El artículo 101 de la Ley de Instrucción Pública de 1857 preveía la existencia de dos escuelas de niños y dos de niñas en los pueblos de 2.000 habitantes, tres escuelas en los de cuatro mil y así correlativamente, de forma que debería contarse con  una unidad más de cada género por cada incremento de 2.000 almas. En virtud de este mandato, Valverde debería haber dispuesto de, al menos, 4 escuelas de cada sexo, aunque la realidad fue mucho más lacónica. Pero Valverde no fue una excepción. Casi ningún ayuntamiento cumplía sus obligaciones legales respecto a la instrucción pública, y se acudía reiteradamente al pretexto de la falta de presupuesto.
El mapa escolar de principios del siglo XX se componía, en lo tocante a los colegios masculinos, de dos escuelas de distrito de creación decimonónica. La escuela del primer distrito se situaba, desde 1862, en la antigua casa-cuartel de la Guardia Civil, en el número 17 de la Calle del Duque –espacio reconvertido en plaza de abastos desde 1935-, y la escuela del segundo distrito, abierta en 1893, en el número 20 de la calle Nueva, en un inmueble propiedad de José de Mora Vizcaíno. El primer maestro que conocemos fue Fernando Ramírez Villaseñor, profesor titular auxiliado por un ayudante. Desde 1869 ocupó el cargo de adjunto el valverdeño Francisco Mora Marín. Desde la década de 1890, la escuela del primer distrito estuvo a cargo de Francisco Romero Sánchez (1864-1937), hijo de un carpintero de Aracena,  quien ocupó la plaza de forma definitiva desde 1900 hasta su jubilación[3]. Entre sus discípulos destacaron Nicolás Gómez, los hermanos Manuel y Diego Romero, el notario, Miguel Macías,  Nicolás Hidalgo, Alfonso Parreño Batanero y un largo etcétera.
En  1911, se desdobló la escuela, y desde 1915 ocupó la nueva clase el sevillano Juan Antonio Gordillo Muñoz (1869-1927).[4]


D. Francisco Romero Sánchez con sus alumnos en la escuela de la calle del Duque. Fue el iniciador de una destacada saga de maestros locales. Foto cedida por Francisco Romero Calleja


D. Juan Antonio Gordillo Muñoz con su alumnado de la escuela del primer distrito. Año 1918.  Ramírez Copeiro, p. 287.
La escuela de la calle Nueva fue inaugurada por Manuel Delgado Lora, maestro nacido en 1857 y maestro desde 1880, casado en Valverde del Camino donde permaneció hasta 1905, antes de entrar en el servicio de inspección e iniciar su particular diáspora laboral[5]. Estuvo secundado por Bernardino Iglesias Pérez, natural de Zalamea la Real y anterior maestro en La Puebla de Guzmán.
En los albores del siglo XX, habitó su cátedra Evaristo Arrayás Mariano (1882-1957), opositor del año 1905 y natural de El Pozuelo, quien ocupó el aula del fondo del inmueble, y lo continuó haciendo ya de forma definitiva desde 1917[6]. De 1915 a 1921 se ocupó de la auxiliaría de la calle Nueva Antonio Rodríguez-Cepeda García (1891-1964), el maestro de Benacazón, que luego  impartiría su magisterio en todas las escuelas públicas de la localidad. En 1921 debió llegar como auxiliar Gregorio Romero Bogado (1890-1980), opositor de agosto de 1915, después de pasar por las escuelas de Escacena, Aracena y Calañas. Era hijo de Francisco Romero Sánchez y ocupó el aula “de la parte de abajo”. Entre los auxiliares encontramos a Rafael Moya Jiménez y otros profesores sustitutos como Miguel Bermejo, en 1916, o Gerardo Higinio Sánchez Guillermo en 1918, cuya permanencia en Valverde fue efímera.[7]
A estas dos escuelas de distrito se unieron las escuelas de adultos, existentes en Valverde, al menos desde la década final del siglo XIX. En aquellas fechas, José Limón Mojarro solicitó una subvención de 240 pesetas, la misma que anteriormente disfrutaba su padre, José Limón Corralejo. El hijo asumió la docencia tras la muerte de su progenitor, acaecida el 4 de marzo de 1899. La escuela se mantuvo hasta febrero de 1906, cuando fue suprimida por el ayuntamiento, aduciendo que el maestro carecía del título correspondiente[8]. Además, Manuel Delgado Lora abrió una segunda escuela de adultos en 1901[9], mientras que en 1918 se instaló la luz eléctrica en el salón de la escuela del segundo distrito para reanudar aquellas tan necesarias clases nocturnas de adultos. 
Las escuelas públicas de niñas fueron asimismo dos: la escuela de la Calle Abajo desde 1899 y el colegio unitario del Cabecillo de la Cruz desde 1920. La Real Orden de 25 de febrero de 1911, durante el gobierno de José Canalejas, permitió desdoblar las escuelas unitarias, a fin de duplicar la oferta educativa. Fulgencia de Prada Moreno, y Josefa García Ruiz[10] fueron las maestras nacionales de niñas de principios del siglo XX. En 1916 aparece una tercera educadora, Josefa María Sánchez Garrido, en sustitución de Fulgencia Prada.
La segunda fue inaugurada el 14 de marzo de 1920, actuando como padrinos Carlos Kaesmacher, director general de The United Alkali Company y de la Compañía Anónima del Buitrón, y su esposa Rella. La escuela fue bautizada con el nombre de San Carlos, en honor del ingeniero de minas natural de Lieja[11], quizá esperando sacar provecho de su liberalidad y la de su esposa. Se convirtió en una escuela unitaria, que recogía niñas de distintas edades, y estaba desdoblada de la hasta entonces única escuela femenina de la localidad.
Se hizo cargo de las clases Dorotea Carmen Romero Regaña nacida en Sevilla en 1869, maestra desde 1895 y directora de escuelas primarias desde 1904[12]. En 1902 estaba destinada en La Corte, en 1904 en El Buitrón y El Pozuelo; desde 1905 en El Membrillo y desde 1911 en  Riotinto[13], antes de asentarse en Valverde[14]. Algunas de sus alumnas de la década de 1920 fueron Mª Jesús Domínguez Batanero, las hermanas Petra y Antonia Domínguez, Rafaela, Rosalía, las hermanas Tocino -Teresa, Pepita o Fernanda-,  Petra Muñoz, Francisca y Petra Oso, Encarnación y Rocío Arroyo Arroyo, Dolores y Reposo Castilla Morales o Ángela Pérez, Elisea Borrero Lazo o Petra Arroyo Quiñones.
Otras familias optaron por el colegio religioso de las hermanas Salesianas, inaugurado el 8 de enero de 1894 en su ubicación primigenia, en la casa de ejercicios de Santa Ana, hasta que en octubre de 1904 se produjo el traslado de la comunidad a la casa-colegio actual. Muchas  niñas entraban en el parvulario de las Salesianas, algunas con apenas dos años: «Entré con dos años, antes de la cuenta, junto a  mis hermanos Reposo y Ernesto para no molestar en la droguería de mis padres. Recuerdo que costaba dos pesetas al mes. Naturalmente, por mi corta edad,  me pasaba todo el día llorando».[15]
De 1909 datan las Escuelas Vicentinas del Sagrado Corazón, ubicadas en el, por entonces, viejo y abandonado edificio que servía de almacén parroquial, gracias a los desvelos del párroco  Jesús de Mora y de una valverdeña, Rosa Rite, hija de Manuel Rite Marín, arriero de profesión que transportaba velas de cara a las dos Castillas y traía de aquellos pagos trigo para la población[16]. Sus obras se iniciaron en abril de 1909, con presencia de Manuel Siurot y de Manuel González, por entonces arcipreste de Huelva. Estuvieron regentadas por Desiderio Gordillo Salas, encargado de la enseñanza primaria y por el presbítero Antonio Ulquiano Murga, profesor de enseñanza secundaria y director del centro, recién llegado del Colegio Español Romano. Más tarde, se unió a ellos el joven profesor Manuel Mora Gómez. Las Vicentinas sirvieron para impartir clases nocturnas y gratuitas para niñas y jovencitas que no podían acudir a las escuelas normales por su trabajo o pobreza. La formación religiosa quedó a cargo de Rosa Rite y de Juana y Concepción Iñurrieta. Además, en el piso alto funcionaron también escuelas diurnas de niños que debían pagar una pequeña cuota desde 1910 a 1923
En 1927 abrió sus puertas el convento y el colegio valverdeño de las Hermanas de la Cruz. Un bienhechor de la casa, D. José Limón –creemos que el ex-diputado liberal José Limón Caballero-, se comprometió  dar cinco duros mensuales para las clases de las niñas. En septiembre de 1927, al día siguiente de la festividad de la Patrona de Valverde, se abrieron las clases y se dieron dos comidas a los pobres en la propia clase, costeadas por Ildefonso Mora Benítez, concejal durante la dictadura de Primo de Rivera. En dicho colegio se han educado cientos de valverdeñas.[17]
También aquel año de 1927, durante  la alcaldía de  Daniel Rodríguez Romero, fue inaugurada la escuela de la Luz, ubicada en la Carretera de Calañas en el solar que hoy ocupan la Casa de la Cultura y la Cruz Roja, en la prolongación de la por entonces calle Primo de Rivera y actual Real de Arriba. Su denominación responde al hecho de que allí estuvo instalada la primera central eléctrica de Valverde o “fábrica antigua”, bajo la denominación de Nuestra Señora del Reposo,  fundada por Tomás Gallart González en el año 1904[18]. La escuela funcionó desde 1927 y cerró sus puertas en 1937, cuando se inauguró el Grupo Escolar.
El edificio pertenecía a  la sociedad  formada por Manuel Rodríguez Romero y Rafael Fleming Zarza. Apelando a su condición de  «amantes de la enseñanza» ofrecieron el inmueble por una cantidad de 25.000 pesetas. El 28 de junio el inmueble fue visitados por los maestros Evaristo Arrayás y Manuel Viso Toscano junto al maestro albañil, Manuel Mora, y los miembros del ayuntamiento: «resultando de la visita que los locales reúnen las condiciones exigidas por la legislación de Instrucción Pública y que la propiedad tienen un valor superior a cincuenta mil pesetas».
Pese a la opinión entusiasta del alcalde, hubo cierta controversia respecto a la idoneidad de la compra. El alcalde se retiró de la deliberación por incompatibilidad, -ya que su hermano era uno de los propietarios-, resultando empatada, en primera instancia, la votación sobre la aceptación o el rechazo de la oferta. José Llanes Pérez se opuso de forma vehemente, alegando para ello  su situación periférica y  el supuesto  carácter antihigiénico de los locales, muy cercanos a la tenería del Dolor y al matadero público, mientras se decantaba por el ofrecimiento de otro local alternativo ofrecido por parte de Emilio Julián Gordillo. A ello añadiría después otra objeción: las dificultades para cruzar la carretera en época de lluvias que obligaría a los críos «a saltar por el cortinal de la Compañía Alkali Company. Manuel Arrayás se unió a este parecer. Otros dos concejales, Diego Parreño y José Buenafé,  pidieron más tiempo para estudiar esa segunda oferta, aunque en segunda instancia  estos dos últimos dejaron guiar sus votos en virtud de la valoración del inspector. Finalmente, se aceptó la oferta de compra por valor de 25.000 pesetas, pagaderas en cuatro años, a razón de 6.250 pesetas anuales, en la sesión plenaria celebrada el 9 de julio de 1927.  La decisión contó con el respaldo del médico José María Mora Mora.
El centro educativo estaba formado por dos aulas: la primera puerta de la izquierda daba acceso a la escuela del maestro almeriense Ángel Martínez Egea, quien permaneció en Valverde desde 1927 hasta 1934[19], mientras la  escuela trasera era la de Manuel Viso Toscano, opositor en 1920- 1921,  quién llego a Valverde en enero de 1922 y obtuvo  destino como propietario en la escuela nº 1 en 1924, la de la calle del Duque[20], aunque también pasó  por la escuela de la Luz. Desde 1932 fue trasladado a la Escuela de la Estación. Antonio Infante Valdayo, había nacido en 1881 en  Bollullos del Condado. Entre 1906 y 1909 se aplicó en la dura tarea de sacar las oposiciones[21]. Entonces ejerció en su ciudad natal, en Niebla en 1909,[22] Villarrasa, y El Buitrón[23]. Desde 1923 fue maestro de Escacena del Campo, de donde llegó a Valverde en 1928, atraído por los aires serranos que debían servir de bálsamo para el asma de su esposa, Carmen Acosta Berdiè. Inicialmente impartió docencia en la Escuela de la Luz, desde 1929 hasta 1932.[24]
La Escuela de la Luz eran, como las anteriores, una escuela tipo salón, con la mesa del maestro sobre la tarima y pupitres corridos. Desde 1932, contó con un guarda, Antonio Ramos Marín, quien viviría gratuitamente en el inmueble, mientras desempeñara su cargo de vigilante, como lo había hecho en años anteriores en la parada de caballos sementales. Tras su cierre, el edificio se convirtió en el llamado reformatorio, uno de los puntales de la red carcelaria local.  

Los alumnos de la Escuela de la Luz y su maestro D. Antonio Infante Valdayo. Hacia 1929-1930. Archivo de Antonio Garrido Canto. Patio de la escuela, actual biblioteca José Arrayás Arroyo y antigua parada de sementales.


[1] SANCHEZ CORRALEJO, J.C (2004). “La escuelas y los maestros de nuestros abuelos. El mapa escolar valverdeño desde la época isabelina hasta la crisis de la Restauración. Raíces, nº 7, pp. 36-47.
[2] SANCHEZ CORRALEJO, J.C. “La escuelas y los maestros de nuestros abuelos II, II y IV. Raíces, nº 8, 9 y 10. 
[3] Vid. El magisterio español. 02/06/1900, p. 5. “Nombramientos del concurso”. En 1909 era  auxiliar de la escuela y  solo recibía 15 pesetas mensuales, aunque la municipalidad costeaba el alquiler de las viviendas de los maestros nacionales, o ponía a su disposición una morada anexa a su escuela. Don Francisco vivió desde 1914 en el número 68 de la calle Sagasta, actual Real de Arriba, cuyo alquiler se elevaba a  25 pesetas mensuales.
[4] Su esposa Ildefonsa Romero Díaz (1888-1946) fue también educadora y, según sus nietos, la primera maestra de Candón. En mayo de 1915, Gordillo Muñoz obtuvo plaza definitiva en Valverde (El magisterio español. 22/05/1915, 13). Sin embargo, el matrimonio pidió traslado a Granada y más tarde a Valladolid, buscando mejorar su nivel de vida. Juan Antonio sufrió una congestión en tierras castellanas y quedó muy disminuido. Murió, siendo maestro de Aguilarejo (El magisterio español. 5/11/1927, 11) . Su esposa continuó entonces con la docencia en Valverde, pero en su propia escuela privada.  Si se quiere abundar en la biografía completa de estos maestros recomendamos los textos anteriores.  Otros maestros  destinados en Valverde desde la década de 1880 fueron Francisco Zamora o Rafael Moya Jiménez.
[5] Según A, Rico era oriundo de Osuna, aunque su familia lo relaciona con Madrid. Poseía el título de maestro elemental y la reválida de Grado Superior. En 1880 estaba destinado en Ayamonte y fue el encargado de inaugurar la escuela de la Calle Nueva, estrenada en 1893. Se caso con la valverdeña María Pernil y tras la muerte de ésta, ya en segundas nupcias,  con Margarita Cejudo Parreño. Durante su labor docente se produjo la caída del famoso rayo de 1902  que arrojó al suelo a sus alumnos, entre ellos a su propia hija, Mª del Dolor Delgado Cejudo, madre de Mari Conchi Yoldi Delgado y mató el caballo del maestro. En 1907 estaba en Alcalá del Rio (El magisterio español. 12/06/ 1907);  en 1908 fue trasladado a Riotinto  (Gaceta de instrucción pública. 15/06/1908, p.1054) y desde 1911 a Nerva (El magisterio español, 11/03/1911). En 1913 volvió al cuerpo de inspectores en la categoría de 3.000 pesetas (Gaceta de instrucción pública y bellas artes. 29/10/1913, 10) y fue trasladado a Castellón en febrero de 1914 (Gaceta de instrucción pública y bellas artes. 18/2/1914, 9); aunque al poco tiempo pidió el reingreso en el magisterio (Gaceta. 19/8/1914, p.12). Desde 1916 era maestro de la Palma del Condado y tenía una antigüedad de 31 años y 11 meses  (El magisterio español: 02/0371916, 8 y El Siglo futuro. 4/5/1917, 4.). Finalmente pasó de la Palma del Condado a Sevilla al S.G. Reina Victoria. (El magisterio español.30/06/ 1917, 1. y Gaceta de instrucción pública. 18/07/ 1917, 457) y en la capital hispalense pasó sus últimos días. Murió con 45 años de servicios, de ellos cuatro y medio en el servicio de inspección en dos fases: en 1906/07 en Ávila, en 1913-14 en Castellón. (El Lábaro.12/02/ 1906 y El magisterio español.18/03/1929, 16).  
[6] Datos extraídos de Gaceta de instrucción pública. 24/11/1905, p. 4.  En 1909 fue destinado a Valverde,  por resultas de concurso único  (La Educación  10/10/1909,  2.), pero  luego paso a Nerva.  En enero de 1917 obtuvo de nuevo plaza en Valverde  (El Imparcial. 25/1/1917, 4.). 
[7] Un esbozo biográfico de mayor calado puede seguirse  en la serie “La Escuela y los maestros de nuestros abuelos” y en  SANCHEZ CORRALEJO; J.C, 2012, “El grupo Escolar y Valverde del Camino (1937-1985”.
[8] A.M.V. Actas capitulares de 4 de marzo de 1899 y 10 de febrero de 1906.
[9] El magisterio español: 2 de marzo de 1901.
[10] En 1904, Fulgencia Prada llego a Valverde por mor del concurso  de ascensos de 1903 del Rectorado de Sevilla, con destinos anteriores en Belmonte del Tajo (Madrid) y Huelma, Jaén (Gaceta de instrucción pública. 6/2/1904, 5;  30/5/1904,  2 y. 6/9/1904, 3.).  En 1914, García Ruiz  se presentaba a las oposiciones  por el distrito de Sevilla, siendo requerida a para presentar su certificado de nacimiento (Gaceta de instrucción pública y bellas artes. 11/3/1914,  6.). En 1917, tenía un sueldo de 1.100 pesetas (Gaceta de instrucción pública y bellas artes. 16/5/1917, p.6.).Josefa permaneció en la escuela pública de niñas hasta la década de 1930 (Anuario regional descriptivo, de la industria, comercio, agricultura, profesiones, arte y turismo de Andalucía y Norte español de África. 1932, p. 537).
[11] A.M.V.C./L.A.C. de 12, 17,  24 y 31 de enero, 7, 14 de febrero y 1, 6 y 15 de marzo de 1920. 
[12] El pacense: revista de enseñanza. 15 de octubre de 1895. El Día. 3/5/1904, p. 2
[13]  El magisterio español.  29/12/1902; 07/05/1904; 06/07/1904; 25/05/1911 y 25 17/10/ 1911.
[14] Natural de Sevilla y esposa de Casimiro, empleado en la oficina del  ferrocarril, la maestra habitaba en el piso alto y junto al matrimonio convivía su sobrina «Mariquita», que permaneció soltera y se dedicó a las labores del hogar de la maestra, pero que, además, y de forma esporádica,  llegó a ejercer  de sustituta en caso de ausencia de la profesora titular.  Doña Carmen era sevillana y llegó a Valverde ya casada. Cuando se jubiló, situó su hogar en la calle Menéndez y Pelayo. Allí murieron ella, su marido y su sobrina.
[15] Entrevista a Petra Hidalgo Caballero (1920).
[16] ARROYO VALERO, L. (1963). Breve Historia de Valverde,  pp. 96-98.
[17]  SANCHEZ CORRALEJO, JC (2012): “El  Grupo Escolar y Valverde del Camino”. En Del Grupo Escolar al Ceip Menéndez y Pelayo,  p. 27.
[18] Víd. SANCHEZ CORRALEJO, J.C. “Retales de Valverde del Camino en las décadas de 1930 y 1940 (III). La economía que venció a la crisis. Notas sobre el suministro eléctrico”, Facanías. Abril, pp. 22-29.
[19] Nació en Olula de Castro (Almería) el 19 de febrero de 1898 y obtuvo el título de maestro en 1919 (Diario de Almería, 27/06/1919).  Era maestro de clase séptima, procedía de la unitaria de Cariño-Ortigueira, La Coruña  (El magisterio español : 11/05/1927) y se le asignó la escuela de Valverde en septiembre de 1927 (El magisterio español. 12/01/1929, 7).. En agosto de 1934 fue trasladado a la sección Graduada de Viator, Almeria (Diario de Almería. 12/08/1934, p. 2). Se le abrió expediente depurador tras el golpe de estado de Franco por su filiación socialista-comunista. (Antonio Sánchez Cañadas: Memoria y Dignidad. Corduba, 2007, aunque fue reintegrado al servicio
[20]  El correo de Cádiz. 18/08/1920. El magisterio español, 29/01/ 1921; 12/07/1924. En 1928 se presentó a las oposiciones restringidas para cubrir sueldos vacantes con el numero 1.356. (El magisterio español. 17/02/ 1928, 11)
[21] El magisterio español. 16/12/1905. Gaceta de instrucción pública. 24/7/1906, p. 5. y 25/10/1909, p. 6.
[22] El magisterio español. 24/02/1909
[23] El magisterio español. 11/03/1919.
[24] SANCHEZ CORRALEJO, J.C.  (2006): “La escuela y los maestros de nuestros abuelos (III). La educación primaria en Valverde en los años del hambre (1936-1969)”, en Raíces, 9., pp. 37-52.

No hay comentarios:

Publicar un comentario